GMP for cosmetics

GMP para cosméticos

¿Quieres empezar a vender tus productos cosméticos caseros?

Pues presta atención porque, aunque todo el mundo puede hacer productos cosméticos caseros para sí mismo, su familia y sus amigos, es una historia completamente diferente cuando deseas venderlos.

En efecto, tus productos tienen que ser conformes y reglamentarios… y este proceso comienza en primer lugar con las BPF.

¿Qué es exactamente el GMP?

GMP significa : Buenas prácticas de fabricación. Un asunto muy importante y delicado en la industria cosmética manufacturera.

Las BPF describen los principios básicos de una instalación que fabrica productos cosméticos acabados, es decir

fue introducido en 2007 por el ICCR (Internacional Cooperación Cosmética Reglamento, formado por Estados Unidos, Canadá, la Unión Europea y Japón) y está vinculado a la ISO 22716( OrganizaciónInternacionalde Normalización)El Reglamento sobre cosméticos 1223/2009 exige que todos los productos cosméticos que se vendan en el mercado de la UE cumplan las BPF cosméticas establecidas en la ISO 22716. De hecho, tal y como se menciona en el Reglamento 1223/2009 sobre cosméticos de la UE, la fabricación de productos cosméticos debe cumplir las buenas prácticas de fabricación con el fin de garantizar los objetivos del artículo 1.

Se presumirá el cumplimiento de las prácticas correctas de fabricación cuando la fabricación sea conforme a las normas armonizadas pertinentes, cuyas referencias se hayan publicado en el Diario Oficial de la Unión Europea.

¿Cuál es exactamente la finalidad de las GMP?

La finalidad de las BPF es proteger a los consumidores mejorando la seguridad y la calidad de los productos cosméticos en toda la cadena de suministro (desde los productores de materias primas hasta los fabricantes de los productos cosméticos acabados: diseño, formulación, fabricación, envasado, almacenamiento y envío). Confirma que cada paso del proceso se realiza de forma segura, higiénica y responsable.

En resumen, se trata de todas las directrices a seguir en la cadena de suministro completa que podrían afectar a la seguridad y calidad del producto para confirmar la salvaguarda de la seguridad y calidad de los productos cosméticos acabados. Por ejemplo (pero sin limitarse a ello):

  • Empleados del fabricante:

En efecto, el Fabricante de cosméticos debe asegurarse de que sus empleados están formados (higiene y salud del personal), tienen experiencia y están cualificados para producir, almacenar y controlar correctamente los productos para contribuir a su seguridad y calidad, con una buena higiene y limpieza.

  • Entorno del fabricante:

El fabricante de cosméticos debe proporcionar siempre un entorno seguro (para minimizar cualquier riesgo de mezcla de productos, ingredientes y materiales de envasado) e higiénico (almacenamiento, producción, control de calidad, lavado, desinfección, aseos, …) que minimice el riesgo de contaminación y garantizar que se aplican protocolos de limpieza y mantenimiento.

  • Equipo del fabricante:

Todo el equipo debe ser adecuado y utilizarse sólo para sus fines, y debe limpiarse, desinfectarse y mantenerse adecuadamente para evitar la contaminación del aire (como el polvo o la humedad).

  • Materias primas:

Todos los ingredientes, materias primas y materiales de envasado deben garantizar la calidad del producto acabado. Las materias primas deben estar bien organizadas y correctamente etiquetadas, junto con los materiales de embalaje, para evitar que se mezclen con cualquier producto. Las etiquetas también deben contener información sobre el lote para que puedan rastrearse en cualquier punto del proceso de fabricación.

  • Producción:

Un documento de instrucciones claramente redactado debe aclarar (en detalle) cómo se lleva a cabo una actividad de producción específica con:

  1. Una lista de las materias primas utilizadas, incluyendo sus números de lote y cantidades (y el método de fabricación).
  2. Registros creados para captar todos los aspectos del proceso de producción.
  3. Medidas adoptadas en cada paso del proceso para garantizar que el producto acabado cumple sus especificaciones.
  • Productos acabados:

Antes de comercializar un producto acabado, es necesario verificar el cumplimiento de los criterios de calidad definidos (establecidos por la empresa). También hay que añadir normas estrictas de almacenamiento para los productos acabados. Su calidad debe mantenerse durante las operaciones de almacenamiento, envío y devolución del producto.

  • Control de calidad:

La calidad se refiere a la estabilidad de un producto cosmético, su conservación y su función general.

También hay que añadir en los productos acabados la fecha de caducidad, la fecha de apertura y las condiciones de almacenamiento, y todo ello se verifica y confirma con pruebas de laboratorio. Muchas de las pruebas que se exigen comprueban que la calidad de un producto se mantiene en un alto nivel. Por ejemplo, cualquier producto que contenga agua corre el riesgo de contaminación por crecimiento microbiano y requerirá controles de calidad por muestreo para garantizar que el producto se mantiene estable y supera las pruebas de desafío.

  • Reclamaciones y retiradas:

Cualquier queja comunicada sobre productos cosméticos debe revisarse, investigarse y ser objeto de seguimiento. Se trata de un requisito legal que forma parte de la normativa sobre cosméticos. También deben organizarse los pasos para evitar que vuelva a producirse un defecto del producto. Si se sospecha de un problema de seguridad o calidad de alto riesgo, una empresa debe ser capaz de poner en marcha una retirada de productos de forma rápida y eficaz.

La prueba de las BPF puede aportarse de varias formas, incluida una autodeclaración como fabricante.

BPF para cosméticos: por qué es tan importante

Es un asunto muy importante y delicado, porque el éxito de una marca de cosméticos depende en gran medida de su capacidad para fabricar productos cosméticos eficaces, seguros, de alta calidad y con buena reputación. Por lo tanto, es muy importante comprender los fundamentos de las BPF, ya que pueden ser extremadamente beneficiosas (al aumentar las ventas y fomentar la fidelidad a la marca al hacer hincapié en la calidad, seguridad y eficacia del producto) o terriblemente desventajosas y perjudiciales. Por tanto, también es uno de los aspectos más importantes en la industria cosmética.

Por tanto, seguir las directrices de las BPF para los productos cosméticos caseros es muy difícil de conseguir debido a estas BPF, a menos que construyas un auténtico laboratorio cosmético en tu casa (aunque tu producto cosmético acabado sea 100% orgánico, bio, natural, y aunque sólo sea una mezcla de 2 productos).

Una vez más, se trata de proteger a los consumidores confirmando que tus productos cosméticos acabados son seguros, higiénicos y fabricados de forma responsable.

Para más información o ayuda sobre este asunto, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.

Nicolas Lenaers

Representante de Desarrollo Empresarial

nicolas.lenaers@biorius.com

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