Pruebas de laboratorio para productos cosméticos

¿Qué son las pruebas de laboratorio cosmético?

Las pruebas de laboratorio cosmético consisten en evaluar tu producto para confirmar su seguridad, eficacia y cumplimiento de las normas reguladoras en tu mercado objetivo. Estas pruebas garantizan que tus productos son seguros para los consumidores y cumplen las especificaciones requeridas en cuanto a declaraciones y rendimiento. Aunque Biorius no presta directamente servicios de pruebas de laboratorio, podemos guiarte en los pasos necesarios y ponerte en contacto con laboratorios de pruebas de confianza.

Cómo apoya Biorius tus necesidades de pruebas de laboratorio

En Biorius, actuamos como tu socio de cumplimiento normativo. Aunque no realizamos pruebas de laboratorio, proporcionamos un apoyo esencial mediante:

Tipos de pruebas de laboratorio cosméticas necesarias:

Biorius aporta experiencia de confianza y soluciones sin preocupaciones a tus necesidades de cumplimiento normativo. Actuando como tu Persona Responsable en la UE, Reino Unido y Canadá, y como tu Agente en EE.UU., nos ocupamos de todos los detalles -desde las notificaciones de productos hasta el cumplimiento continuo- para que puedas centrarte en el crecimiento.






Una prueba de estabilidad evalúa la durabilidad e integridad de los productos cosméticos a lo largo de su ciclo de vida. Esto es lo que implica:

  • La prueba evalúa la resistencia del producto en diversas condiciones, como la temperatura y la luz, desde la producción hasta el final de su vida útil.
  • Evalúa factores clave como el pH, la viscosidad, la estabilidad del color y la compatibilidad con su envase.
  • Realizado durante al menos tres meses, el ensayo simula las condiciones de transporte y almacenamiento para garantizar la seguridad y la eficacia.
  • Los resultados determinan la vida útil del producto y la “fecha de caducidad” recomendada tras su apertura.

También puede realizarse al mismo tiempo una prueba de compatibilidad complementaria para comprobar si hay interacciones entre el producto y su envase.

Una prueba de provocación (también conocida como PET o Prueba/Estudio de Eficacia de Conservantes) evalúa la eficacia de los conservantes de un producto cosmético valorando su capacidad para controlar el crecimiento microbiano. El producto se expone a microorganismos patógenos específicos(Escherichia coli, Pseudomonas aeruginosa, Staphylococcus aureus, Candida albicans y Aspergillus niger) y se controla durante 7, 14 y 28 días.

La prueba mide la reducción de patógenos para confirmar la eficacia del conservante, garantizando la seguridad microbiológica del producto.

El análisis microbiológico garantiza que el producto está libre de contaminación durante la fase de producción. Consiste en medir:

  • Microorganismos aerobios totales
  • Levaduras y moho

Dependiendo del tipo de producto y de su formulación, esta prueba puede no ser siempre necesaria. Sin embargo, cuando se realiza, es esencial para mantener la seguridad y la calidad del producto.

Las pruebas de eficacia son esenciales para validar las declaraciones de rendimiento de los productos cosméticos. Estas pruebas evalúan científicamente si el producto proporciona los beneficios prometidos, como efectos hidratantes, antienvejecimiento o calmantes de la piel.

Al evaluar la funcionalidad del producto en condiciones reales, las pruebas de eficacia garantizan que las afirmaciones no sólo sean convincentes, sino también veraces y conformes con las normas reglamentarias. Este proceso fomenta la confianza del consumidor y se ajusta a la normativa del sector.

Las pruebas de FPS son esenciales para los filtros solares y los productos de protección solar, a fin de garantizar el cumplimiento de los requisitos normativos y un etiquetado preciso. Para la Unión Europea, las pruebas deben ajustarse a la Recomendación 2006/646/CE de la UE e incluir:

  • Evaluación del FPS (in vivo)

  • Protección UVA

  • Pruebas de resistencia al agua

Estas pruebas son fundamentales para garantizar que los productos de protección solar cumplen las normas de la UE, proporcionando una protección fiable contra la radiación UV y manteniendo al mismo tiempo la transparencia y la confianza de los consumidores.

Las pruebas de seguridad son un paso crucial para garantizar que los productos cosméticos sean seguros para los consumidores. Según el tipo de producto y su formulación, pueden ser necesarios ensayos específicos para evaluar los riesgos potenciales.

  • Human Repeat Insult Patch Test (HRIPT)
    Esta prueba de irritación cutánea, realizada bajo supervisión dermatológica, evalúa el potencial de irritación o sensibilización. Los productos que superan esta prueba pueden llevar la declaración “dermatológicamente probado”.

  • Prueba de irritación ocular
    Esta prueba evalúa el riesgo de irritación ocular causado por un producto cosmético o sus ingredientes, garantizando la seguridad de los productos destinados a utilizarse cerca de los ojos.

La elección de las pruebas depende del uso previsto del producto, su público objetivo y los requisitos normativos, garantizando la seguridad del consumidor y el cumplimiento de las normas del sector.

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