Introducción a la Norma

Los beagles son perros adorables que se han utilizado en pruebas de laboratorio durante décadas. En el pasado, muchos ingredientes cosméticos se han probado en esta especie.

La certificación vegana resalta la importancia que tu marca cosmética concede al bienestar animal y te permite compartir con tus consumidores un mensaje más amplio sobre la ética y los valores de tu marca.

Entre otros elementos, un producto cosmético con certificación vegana se define por no contener ingredientes ni subproductos animales, no utilizar ingredientes ni subproductos animales en el proceso de fabricación y no realizar pruebas en animales por parte de ninguna empresa o contratista independiente.

Como recordatorio, el Reglamento europeo sobre cosméticos CE nº 1223/2009 prohibió la experimentación con animales en productos cosméticos en 2004 y en ingredientes cosméticos en 2009 y 2013 (artículo 18). Dado que los Criterios Comunes de la UE nº 655/2013 prohíben cualquier comunicación comercial que «transmita la idea de que un producto tiene un beneficio específico cuando este beneficio es el mero cumplimiento de unos requisitos legales mínimos» (Criterio de Cumplimiento Legal, §3), afirmar que un producto es «libre de crueldad» es, por tanto, ilegal en la UE. A día de hoy, no hay muchas formas de proporcionar esa información al consumidor sin plantear problemas de cumplimiento. Sin embargo, la declaración «vegano» es una opción, ya que su definición abarca la no experimentación con animales, entre otros requisitos.

Originado en la industria alimentaria, el veganismo es la práctica de abstenerse de consumir o utilizar productos animales. Esta tendencia, muy popular entre la generación más joven, pretende excluir toda forma de explotación y crueldad hacia los animales. En una fórmula cosmética con certificación vegana, no se permite ninguna materia animal. Como tal, un producto declarado «vegano» transmite mucha información al consumidor, concretamente los valores fundamentales de la empresa de cosméticos y su compromiso con la protección de los animales.

Dado que los ingredientes de origen animal son bastante comunes en la industria cosmética, y que las pruebas con animales siguen estando permitidas en muchos países, esta certificación es especialmente significativa para las marcas de cosméticos.

Algunos ejemplos de ingredientes de origen animal en los productos cosméticos cotidianos son:

• El carmín (CI 75740), un pigmento que suele encontrarse en barras de labios y coloretes, que se fabrica a partir de cochinilla triturada.
• Ingredientes procedentes de las colmenas, como la miel, el propóleo y la cera de abeja, que suelen estar presentes en los productos labiales.
• Ingredientes lácteos, como la leche de burra, presente en algunos productos para el cuidado de la piel.
• Lanolina obtenida de la lana de oveja con propiedades emolientes, hidratantes y protectoras, que se encuentra habitualmente en cremas y bálsamos y no está prohibida por las etiquetas ecológicas.
• El colágeno, la glicerina, el escualeno y la queratina proceden de proteínas animales, aunque también existen en forma vegetal.

Criterios de certificación vegana

BIORIUS se basa en las normas de la Vegan Society para la certificación vegana.

Según estas normas, un producto puede certificarse como «vegano» si cumple los cuatro requisitos siguientes:

• Sin ingredientes animales ni derivados de animales
• Sin experimentación animal de los ingredientes ni del producto acabado
• Ningún organismo modificado genéticamente con genes animales o sustancias de origen animal
• Cumplimiento de las normas de cocina e higiene

Algunos ingredientes cosméticos pueden ser más peliagudos que otros y a veces se requieren revisiones en profundidad. Cuando surgen dudas, BIORIUS siempre investiga con el debido cuidado y transparencia.

Logotipo de certificación y validez

Al cumplir los criterios de la certificación «Vegano», recibes:

• un certificado firmado
• el derecho a utilizar el logotipo «vegano» de BIORIUS en la etiqueta de tus productos cosméticos certificados y en tu sitio web.

Esta certificación sigue siendo válida mientras no cambie la composición del producto cosmético. En caso de que el producto no pueda obtener la certificación, el informe BIORIUS explica lo que hay que cambiar y puedes volver a presentar el producto una vez corregida la fórmula.